Un hábito cotidiano como el cepillado de dientes, también debe adaptarse a las nuevas circunstancias. Por ello, os dejamos estas recomendaciones:
1. Lavarse muy bien las manos con agua y jabón antes de tocar el cepillo. Los virus pasan de las manos a la mucosa oral.
2. Proceder al cepillado de dientes habitual.
3. Enjuagar bien el cepillo después de cada uso al objeto de eliminar restos de pasta y residuos alimenticios.
4. Mientras dure la epidemia de coronavirus se recomienda desinfectar el cabezal del cepillo con agua oxigenada diluida al 1% durante un minuto.
5. Secar bien el cepillo para eliminar el exceso de agua y humedad.
6. Los cepillos deben almacenarse con el cabezal hacia arriba, alejados del sanitario ( al menos 1 metro ) para evitar su posible contaminación.
7. Los cepillos no deben guardarse amontonados por el riesgo de contaminación cruzada de uno al otro al tocarse.
8. Al finalizar, volver a lavarse bien las manos con agua y jabón.